¿Se están usando los Tratados de Libre Comercio? Retos en el aprovechamiento del comercio preferencial
En las últimas dos décadas, la literatura ha mostrado diferentes impactos que tienen los tratados de libre comercio (TLC) sobre el funcionamiento de las empresas. Estas investigaciones han evidenciado que la reducción de tasas arancelarias asociadas a la entrada en vigor de acuerdos comerciales conduce a un incremento en el volumen exportado e induce la entrada de nuevos productos a distintos mercados (Kuno et al.,2016; Baier et al.,2018), y lleva a unos períodos de exportación más prolongados (Besedes et al., 2016; Nguyen y Duong, 2019).
Aunque las tasas preferenciales están disponibles para todos los exportadores, el acceso a estas no es automático. Las empresas exportadoras deben demostrar que sus productos cumplen con las reglas de origen, es decir con algunos criterios necesarios para determinar la procedencia nacional de un producto. Para esto, las empresas exportadoras deben emitir un certificado de origen (CO) ante las autoridades aduaneras respectivas y así, pueden acceder a las tarifas preferenciales de un acuerdo comercial.
El gran reto: la utilización de los acuerdos comerciales
Distintos autores han demostrado que las empresas que cumplen con las reglas de origen tienen mayores volúmenes comerciales, un menor riesgo de salida y un aumento en sus ventas en comparación con aquellas que no son beneficiarias (Hayakawa et al., 2014; Sytsma, 2022).
A pesar de todos estos beneficios, el bajo aprovechamiento de los actuales acuerdos comerciales y las bajas tasas de adopción de CO son notables. En promedio, se estima que las tasas de utilización de aranceles preferenciales están entre 65% y 80% para los TLC firmados por EE. UU. (Ulloa & Wagner, 2012), entre 15% y 35% para el Sudeste Asiático (Takahashi & Urata, 2009), o alrededor del 24% para Colombia (Murillo & Leal, 2021); país que además ha pasado de tener 5 acuerdos comerciales en el 2000 a 17 en el 2017.
Múltiples razones pueden explicar estas bajas tasas de adopción. Primero, los costos administrativos en la recopilación de información sobre el origen de los insumos, y los procedimientos complicados para obtener el CO (Hayakawa, 2011). Segundo, la firma de nuevos acuerdos comerciales genera un incremento de las medidas no arancelarias (como las reglas de origen), estas suelen ser confusas y, algunas veces, contradictorias (Hayakawa, 2013; Schüle & Kleisinger, 2016). Tercero, para cumplir con las reglas de origen, un exportador debe demostrar el contenido nacional de sus insumos, lo cual puede generar un costo adicional para una empresa que utiliza insumos importados. Por último, es posible que la baja productividad de las empresas no sea suficiente para contrarrestar estos costos que surgen en el proceso de obtención de un CO.
Bajo este marco, el objetivo del estudio “¿Se están usando los Tratados de libre comercio? Evidencia a nivel de transacción para Colombia” es analizar la incidencia de los TLC firmados por Colombia en la adopción de COs por parte de los exportadores nacionales, dado que estos son un requisito necesario para acceder a aranceles preferenciales.
Para esto, empleamos los microdatos de exportación del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) y la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) para el periodo entre 2006 y 2019. Esta base contiene todas las transacciones de exportación realizadas desde Colombia, a nivel de empresa-producto-destino. Dado que la DIAN es la entidad encargada de revisar y aprobar los CO tramitados por las empresas, esta base de datos incluye información que identifica las empresas que reportan CO para un producto y destino específico. El uso de estos datos constituye un avance en esta literatura en donde se suelen utilizar datos de encuestas con bajos números de observaciones y a nivel de firma, más no de transacción.
Definiendo la tasa de uso de preferencias arancelarias como el porcentaje de transacciones que usan CO, evidenciamos que en los primeros años de entrada en vigor del TLC entre Colombia y Estados Unidos (Gráfico 1), el uso de las preferencias arancelarias incrementa levemente, seguido por una disminución los años posteriores. El hecho de que el aprovechamiento de las preferencias arancelarias no aumente después de la entrada en vigor de este TLC es paradójico, dadas las reducciones en aranceles que traen los acuerdos comerciales, y sugiere la existencia de importantes barreras no arancelarias. En la siguiente sección, explicamos brevemente cómo estudiamos más formalmente si los principales TLCs firmados por Colombia si están siendo aprovechados por los exportadores.
Adopción de los certificados de origen ante la firma de un TLC
Para identificar el efecto causal entre la entrada en vigor de un acuerdo comercial sobre el uso del CO, estimamos modelos de Diferencia en Diferencias con tratamientos escalonados (Callaway & Sant’Anna, 2021), en donde la variable de interés toma el valor de 1 si una empresa exporta su producto a un país de destino haciendo uso de un certificado de origen, o 0 en caso contrario. Hay que aclarar que un CO es el soporte del cumplimiento de las reglas de origen de todo acuerdo comercial entre dos países. Por tanto, una empresa exportadora puede notificar la tenencia de un CO con un país socio incluso antes de la firma del TLC, si ya existe un anterior acuerdo comercial con dicho país, como es el caso de los acuerdos de Colombia con Estados Unidos, la Unión Europea, entre otros.
Nuestra variable de tratamiento es la entrada en vigor de los cuatro principales TLCs de Colombia entre 2006 y 2019: (i) México y Canadá (ambos en 2011), (ii) Estados Unidos (2012); y (iii) países miembros de la Unión Europea (2013). La entrada en vigor de estos TLCs es totalmente exógena a las decisiones y comportamiento de las empresas y sus transacciones, dado que las negociaciones y firma de un acuerdo comercial se da entre los equipos de negociación de cada país, conformados en su mayoría por políticos. En este sentido, la entrada en vigor del acuerdo comercial se puede considerar como un tratamiento valido y además el estimador del mismo tendrá una interpretación causal.
Las estimaciones de nuestro modelo revelan los siguientes resultados claves:
- El uso de los CO en las exportaciones colombianas presenta una leve disminución de 0.01 puntos porcentuales en promedio tras la firma de los TLC de Colombia en el periodo de estudio. Sin embargo, el efecto es débil y poco preciso.
- No obstante, existen efectos dinámicos importantes (Gráfico 2). En particular, encontramos un “efecto ilusión” del comercio preferencial: en el año de entrada en vigor del TLC aumenta el uso de las preferencias ar ancelarias por parte de los exportadores, los cuales son seguidos por una disminución en los años posteriores.
Nota: El gráfico muestra los parámetros estimados utilizando la metodología propuesta por Callaway & Sant’Anna, (2021) para los años antes y después de la entrada en vigor de cuatro TLC. Las estimaciones tienen errores estándar con clúster a nivel de país de destino.
Diferentes mecanismos explican nuestros resultados:
- Los TLC imponen estrictos requisitos de cumplimiento de las reglas de origen relacionados con los orígenes de los insumos utilizados en la producción, dificultando el uso de los acuerdos comerciales. Encontramos evidencia de este canal al mostrar que la disminución observada viene dada por los productos manufactureros (en lugar de los productos agrícolas), siendo estos más propensos a utilizar más insumos importados.
- Es más probable que empresas más productivas adopten un CO, ya que pueden cubrir más fácilmente sus costos implícitos. Probamos este mecanismo estimando el modelo para exportadores de diferentes tamaños. Aunque no encontramos un aumento en la tasa de utilización de CO para grandes exportadores, hay evidencia de una reducción por parte de pequeños y medianos exportadores.
- Encontramos evidencia que sugiere que las economías de aglomeración aumentan el uso de CO. Estas economías pueden facilitar la difusión e intercambio de información sobre procedimientos aduaneros y conocimientos técnicos relacionados con las reglas de origen, reduciendo los costos administrativos.
Estos hallazgos tienen varias implicaciones de política. Por un lado, los TLCs inciden de manera favorable en el aprovechamiento del comercio preferencial solo durante los primeros años después de su entrada en vigor. Este comportamiento sugiere que la reducción de tarifas arancelarias no es suficiente para garantizar que todos los exportadores gocen de las preferencias de un acuerdo comercial. De hecho, estudios recientes advierten que los aranceles ya no son la principal barrera de acceso a los mercados para países en desarrollo. Por el contrario, las medidas no arancelarias (como las reglas de origen) constituyen una “barrera invisible” que enfrentan las empresas a la hora de acceder a mercados internacionales (ITC, 2015).
Por otro lado, son los exportadores de productos manufactureros a quienes más se les dificulta acreditar el cumplimiento de las reglas de origen. Sería útil identificar si este comportamiento se debe a que la normatividad de las preferencias arancelarias es demasiado exigente en las condiciones de los insumos de origen local, o si la industria colombiana es incapaz de proveer los insumos necesarios para producir artículos de origen nacional, evitando así el cumplimiento de las reglas de origen.
Investigaciones futuras deben enfocarse en estudiar el bajo aprovechamiento de los acuerdos comerciales y sus efectos sobre las empresas, los consumidores y toda la economía. La identificación de los obstáculos comerciales debe suscitar un mayor interés por parte de los académicos y los encargados de formular políticas para el impulso del sector exportador.
Referencias:
Baier, S., Bergstrand, J., & Clance, M. (2018). Heterogeneous effects of economic integration agreements. Journal of Development Economics, 587-608.
Besedes, T., Moreno-Cruz, J., & Nitsch, V. (2016). Trade integration and the fragility of trade relationship: Theory and empirics. (Working Paper) Georgia Tech.
Callaway, B., & Sant’Anna, P. (2021). Difference-in-Differences with multiple time periods. Journal of Econometrics, 225, 200-230.
Hayakawa, K. (2011). Measuring fixed costs for firms’ use of a free trade agreement: Threshold regression approach. Economics Letters, 113, 301-303.
Hayakawa, K. (2013). Does the use of multiple FTAs force firms to raise local input share?: Evidence of the spaghetti bowl phenomenon. Economic Modelling, 33, 458-461.
Hayakawa, K., Kim, H., & Lee, H. (2014). Determinants on Utilization of the Korea–ASEAN Free Trade Agreement: Margin Effect, Scale Effect, and RoO Effect. World Trade Review 13(3), 499-515.
ITC. (2015 ). The invisible barriers to trade: How businesses experience non-tariff measures.
Kuno, A., Urata, S., & Yokota, K. (2016). Estimating the Impacts of FTA on Foreign Trade: An analysis of extensive and intensive trade margins for the Japan-Mexico FTA. RIETI Discussion Paper Series 16-E-003.
Murillo, M., & Leal, C. (2021). Tratados de libre comercio y duración de las exportaciones: evidencia a nivel de firma para Colombia. Revista Desarrollo y Sociedad , 88, 201-238.
Nguyen, T., & Duong, T. (2019). Diversion effect of economic integration agreements. VNU Journal of Science: Economics and Business, Vol. 35. 12-25.
Schüle, U., & Kleisinger, T. (2016). The "Spaghetti Bowl": A case study on processing rules of origin and rules of cumulation. UASM Discussion Paper Series No. 2.
Sytsma, T. (2022). Improving Preferential Market Access through Rules of Origin: Firm-Level Evidence from Bangladesh. American Economic Journal: Economic Policy, 14 (1), 440-472.
Takahashi, K., & Urata, S. (2009). On the Use of FTAs by Japanese Firms: Further Evidence. RIETI Discussion Paper Series 09-E-028.
Ulloa, A., & Wagner, R. (2012). Why don’t all Exporters Benefit from Free Trade Agreements? Estimating Utilization Costs. IDB working paper series, 388.
