Excluidos en la escuela: Los niños que acumulan fracaso escolar
Esta población es con alta probabilidad candidata a abandonar la escuela, ya que la evidencia muestra que quienes no asisten a la escuela, en una amplia mayoría, estuvieron escolarizados en algún momento, acumularon fracasos y finalmente abandonaron los estudios. El informe también refleja que la acumulación de fracasos es más frecuente en niños y adolescentes que residen en el área rural, que son indígenas o de origen afro y que viven en condición de pobreza. Es decir, que el rezago escolar además de tener dimensiones importantes se concentra en los grupos más vulnerable de la población.
Esta situación confirma la importancia que tienen las acciones de política que se orientan a reducir el rezago escolar antes de que el abandono se haga efectivo. Los programas de transferencia condicionada (PTC) se constituyen en ejemplos de este tipo de políticas. PTC que incentiven el ingreso oportuno a preprimaria y primaria mediante premios a aquellos que lo hacen en edad serian, por ejemplo, más efectivos para reducir el rezago que aquellos PTC que sólo exigen como condición la matricula. Sin embargo, es importante reconocer que estas políticas no son determinantes, ya que asegurar la asistencia no garantiza que el rezago se reduzca, es mas en varios países se ha visto como el rezago ha incrementado de la mano de una mayor cobertura en primeros grados para luego en grados superiores transformarse en un mayor abandono y una menor cobertura.
El informe hace latente la urgencia de políticas que operen desde el lado de la oferta educativa y que actúen en sinergia con los PTC. Estas políticas deben estar orientadas a modificar prácticas pedagógicas que aumentan la probabilidad que el rezago aumente y que son propias del sistema educativo. Entre otras podemos mencionar el deterioro del clima escolar3, la baja expectativas que los maestros puedan tener sobre el futuro de los chicos con rezago, criterios selectivos para el acceso y los mecanismos de segregación de estudiantes que se toleran en las escuela. Sin embargo, el débil conocimiento que se tiene sobre los factores que determinan estos y otros comportamientos que hacen a la práctica pedagógica hacen que el diseño de este tipo de medidas sea delicado. Por tanto, se hace urgente profundizar el conocimiento en ese sentido, ese es el reto para los próximos años. No enfrentarlo implicará el fortalecimiento de la exclusión al interior de la escuela.
